miércoles, julio 14, 2010

Intro

El rótulo de "arte digital" engloba una serie de disciplinas creativas en las que se utilizan una gran variedad de soportes tecnológicos en el proceso de producción o exhibición de imágenes: el video, el láser, la holografía, los medios de comunicación, CD-Rom, Internet. Desde hace más de tres décadas, el aumento de la capacidad para generar, reproducir y difundir imágenes ha llevado a una extensión de su uso en el cine, la televisión y la publicidad y, posteriormente, en la industria de los videojuegos, que no deja de mejorar la calidad visual de sus productos.

Una cosa es cierta: el valor artístico de una propuesta no se asegura por su solidez o novedad tecnológica, y, en ese sentido, a los artistas que trabajan con soportes digitales les queda un considerable camino. También entra en juego la posibilidad de "la mirada" y el valor de la verdadera contemplación de la obra artística, esa actividad que logra superar el plano material de la obra misma para penetrar en el plano de lo trascendnete.
Walter Benjamin llamaba a cierta parte del público de su tiempo "el examinador que se dispersa", porque vivía inmerso en el constante aluvión de las imágenes, las copias y las reproducciones, víctima de una permanente "apercepción".
Este blog busca indagar en las posibilidades de penetrar en el hecho artístico, tal y como lo conocemos en el siglo XXI, intermediado por la tecnología.

martes, julio 13, 2010

Las Imagenes




Las primeras imagenes de las que tenemos registro provienen del período Paleolíto. Son una serie de figuras rupestres halladas en la Cueva de Altamira, con significación religiosa. Seguramente se les atribuyó algún poder mágico pudiendo intervenir en los ritos de fertilidad.







Avanzando en el tiempo, la imagen como objeto mágico cedió su espacio a la representación del objeto mismo.
Se cuenta la anécdota, que en el siglo V a. J.C., dos pintores de la antigua Grecia competían por quién sería el mejor artista de su tiempo. Las uvas que pintó Zeuxis aparecían tan exquisitas y tentadoras que los pájaros bajaron volando e intentaron picotearlas. Zeuxis, entonces, le pidió a Parrasios que corriera la cortina de su pintura para verla, pero resultó que la cortina en sí era una pintura, y Zeuxis se vio obligado a conceder la victoria a su oponente. Se rumoreaba que Zeuxis había dicho: «Yo he engañado a los pájaros, pero Parrasios me ha engañado a mí». En otras palabras, mientras que su obra había conseguido engañar los ojos de los pájaros, la obra de Parrasios había engañado los ojos de un artista.
En un seminario celebrado en 1964, el psicoanalista y teórico Jacques Lacan observó que el mito de los dos pintores revela un interesante aspecto del conocimiento humano: los animales se sienten atraídos por las apariencias superficiales, pero los humanos son seducidos por la idea de lo que está oculto.


© 2000-2010 by EJGS
artwork © 2000-2010 by G. & F. Pedriali
framed images: Jean-Baptiste-Siméon Chardin, detail from The Attributes of the Arts, 1766, The Hermitage, St Petersburg; detail from The Ray, 1728, Musée de Louvre, Paris

Walter Benjamin y lo cultu(R)al

El filósofo Walter Benjamin oponía el arte, "la manifestación irrepetible de una lejanía (por cercana que puediera estar)", a la posesión, a la compulsión que tenía (y tiene) la sociedad actual por "acercar espacial y humanamente las cosas y superar la singularidad de cada dato acuñando su reproducción (...) la necesidad de adueñarse de las cosas en la más próxima de las cercanías".

Citado una y mil veces, Benjamien será recordado, entre otras cosas, por su valoración de la obra de arte, en tanto continuadora de la tradición, de su valor ritual, de su "presencia irrepetible", elementos amenazados por las nuevas técnicas reproductivas de su época, según su visión.

Más contemporáneo, George
Steiner insiste en su libro Presencias reales que nuestro mundo, posmoderno y aquejado por el éxtasis de lo hiperreal, ha perdido contacto con lo original, lo primario. Según el autor, recibimos discursos derivados de unas cosas con las que no tenemos conexión. Y más: el periodismo, medio por excelencia de nuestro tiempo, se ocupa de esos absurdos objetos que "se caracterizan por ser sólo diarios, durar un día sin ayer ni mañana".

La mirada



Video musical tributo a Bette Davis filmado en Super 8 en la década del 80.
Fuente: Youtube.com
Música: "Bette Davis Eyes" por Kim Carnes.

La anulación del aura en el cine, aseguraba Walter Benjamin, era directamente proporcional a una construción artificial de la "personality" fuera de los estudios de filmación. Ese culto desmesurado a las estrellas de Hollywood conservaría esa magia perdida de unos actores que ya no actúan para un público sino para las máquinas, porque "al cine le importa menos que el actor represente ante el público un personaje; lo que le importa es que se represente a sí mismo ante el mecanismo".

Lo que sí es seguro -y quizá sea un dejo nostalgioso- es que desde la cinta de mayor valor artístico a la más insignificante, cualquier documento del pasado, archivado y conservado resulta de enorme valor, muchas veces resignificado con el paso del tiempo.

Warhol y la desenvestidura del acto creador

El Arte Pop fue un importante movimiento artístico del siglo XX que se caracterizó por el empleo de imágenes de la cultura popular tomadas de los medios de comunicación, tales como anuncios publicitarios, comic books y objetos culturales. El arte pop, como la música pop, buscaba utilizar -valga la redundancia- imágenes populares, en oposición a la elitista cultura existente en Bellas Artes, separándolas de su contexto y aislándolas o combinándolas con otras, además de resaltar el aspecto banal o kitsch de algún elemento cultural, a menudo a través del uso de la ironía.

Decía Jean Baudrillard en El Snobismo maquinal que la estética brinda al sujeto un cierto dominio sobre el orden del mundo, una cierta "sublimación" de la ilusión del mundo que de otro modo nos aniquilaría. Algunas culturas, dice, han elegido la violencia y los sacrificios humanos, mientras que la cultura occidental ha preferido generar la ilusión mediante "la forma cultivada, dócil, del simulacro de la forma estética". Sin embargo, para este filósofo, tanto el arte contemporáneo como Andy Warhol -uno de los mayores exponenetes del pop art- son "la ilustración de este simulacro incondicional contra la regla de juego del arte". En este sentido, Warhol elimina todo deseo de trascendencia de la obra artística, quitando lo que es más propio en ella, el deseo propio del acto creador, "un sujeto encargado de transformar el mundo real en su imagen", provocando así la "desenvestidura de acto creador", la desacralización total de la actividad artística.




"El aura de Warhol es la de un simulacro incondicional. Para mí, Warhol es un mutante"

(Baudillard, Andy Warhol, Snobismo Maquinal)

Lo Banal según Baudrillard

"La banalidad es lo más cruel que existe, porque termina por exterminar el sentido y el destino. Con su aire neutro y homeostático, esconde una violencia extrema, difusa por doquier, que no se puede combatir en términos de instituciones o de derechos humanos. Finalmente es lícito pensar que el hombre tiene todo el derecho de ser banal y, por lo tanto, de desaparecer."